Mis dias se consumen largamente por las calles de la tristeza de mi alma, cerca de un cementerio de sentimientos vagabundos que no consiguen descansar en paz en mi mente..mientras tu te encargas del velorio y el chocolate caliente



Oh bien escuchando temas de calle 13 o.O Jajaja si nose, me agarro ganas
Creo que estos últimos dias lo estoy pasando bastante bien a pesar de todo, me doy cuento que tengo los re amigos que valen la pena, la verdad no me puedo quejar y no los cambiaría por nada. Aunque uno se sienta mal o mas o menos, con estar con ellos un rato te olvidas de todo y me hace bastante bien. Uno se queja siempre de boludeces que por ahi hacen pero si no están nose que haría, son hermanos de la vida. En cuanto a otras cosas (? Mas solo que un perro, pero bueno esta bien yo me la busque, las cosas no son cuando uno quiere sino cuando se da.
Pero ya esta, no me quedaria esperando porque esta vez seria totalmente en vano por lo que veo.
Espero que este sábado no se acabe el mundo, cosa q no creo, no saben que inventar ya jajaj,
y ahora suenaa, un tema de pet shop boys :/ si ya es cualquiera mejor me retiro...

Aceptando la triste realidad


How blind can you be, don't you see?
You chose the long road, but we'll be waiting


Bye, bye, beautiful!

Bye, bye, beautiful!

Las cosas no son exactamente como piensas


Una muchacha estaba aguardando su vuelo en una sala de espera de una gran aeropuerto. Como debía esperar por muchas horas, decidió comprar un libro para matar el tiempo. También compro un paquete de galletas. Se sentó en un asiento en la sala VIP del aeropuerto para poder descansar y leer en paz. Al lado del asiento donde estaba la bolsa de galletas se sentó un hombre que abrió una revista y comenzó a leer. Cuando ella tomo la primera galleta, el hombre también tomo una. Ella se sintió indignada, pero no dijo nada. Apenas pensó: "pero, que descarado, si yo estuviese mas dispuesta la daría un golpe en el ojo para que nunca mas se le olvide". Cada vez que ella tomaba una galleta, el hombre también tomaba una. Aquello la dejaba tan indignada que no conseguía reaccionar. Cuando quedaba apenas una galleta, pensó: "ah... que será lo que este abusador va a hacer ahora?". Entonces el hombre dividió la ultima galleta por la mitad, dejando la otra mitad para ella. Ah!! aquello era demasiado! se puso a bufar de la rabia! Entonces cerro su libro y sus cosas y se dirigió al sitio de embarque. Cuando se sentó, confortablemente, en su asiento, ya en el interior del avión, miro dentro de la bolsa y para su sorpresa su paquete de galletas estaba allí... todavía intacto, cerradito!! Sintió tanta vergüenza. Solo entonces percibió lo equivocada que estaba, había olvidado que sus galletas estaban guardadas dentro de su bolsa!! El hombre había compartido sus galletas sin sentirse indignado, nervioso, consternado o alterado, mientras ella quedo muy trastornada, pensando que estaba compartiendo las de ella con él. Y ya no había mas tiempo para explicaciones... ni para pedir disculpas

Cuantas veces, en nuestras vidas, estamos comiendo las galletas de los demás, y no somos conscientes de ellos?. Antes de llegar a una conclusión... observa mejor!! Tal vez las cosas no sean exactamente como piensas, no pienses lo que no sabes acerca de las personas